Y empezamos diciembre.
El tráfico de hoy ha estado particularmente irritable. Lo odié. Así como ha todos los desadaptados a los cuales el touring les regalo el brevete y están sueltos en la carretera.
La navidad a la vuelta de la esquina y ya me siento presionada a comprar regalos para todos, a apurarme por llegar a un centro comercial y aprovechar los descuentos del black friday lorcho, de tener la nueva Tablet S3 con microondas incorporado...
Me siento abrumada por los cierrapuertas, por las ofertas, por los porcentajes de descuento y las tasas preferenciales, las nuevas tendencias de moda y la tecnología que le agrega letras a cada modelo de aparato.
Salía de la universidad y no quise manejar. Vivo a 3 cuadras y quise caminar, caminar y ver los árboles y alguno que otro pastrulo que aprovecha la oscuridad del parque para prenderse, quise cantar en voz alta y alucinar (tal vés producto de la horneada) que mi voz es linda.
Estas tres cuadras se convirtieron en toda la manzana, porque la conversación conmigo misma se puso mas interesante de lo qué pensé.
Y en algún momento empezamos a poner en duda los sacrificios que estamos haciendo, si es necesario matarme en la chamba y quedarme hasta tarde para trabajar ese informe, si estoy haciendo bien en perderme las vacaciones por iniciar un nuevo proyecto, si estoy perdiéndome la vida trabajando y estudiando, y para qué? si la vida es ahora!
La vida es ahora, ajá. Según quien? Según Visa, Visa que te cobra un porcentaje por disfrutar de esa parrilla frente al mar que al mes siguiente te costará trece por ciento más.
Qué tan necesario es tener los nuevos zapatos con el color de la temporada (que por si acaso es el azul)? Realmente necesito tener un nuevo carro? Para qué sirven los teléfonos con cámara?
Por qué pago 45 soles por un chaufa en Madame Tussan si puedo tener uno a 13 so?
Serán las hormonas, será la falta de compañía, será que conversar conmigo misma me enreda aún más, será el sereno...
Realmente no tengo conclusión final a este post.
Solo terminamos de conversar, recogí mis estados de cuenta del buzón y abrí la laptop, pensando en el nuevo post de esta noche.
viernes, 29 de noviembre de 2013
jueves, 28 de noviembre de 2013
Biatch is back
Abro la laptop después de 9 meses.
Está mas lenta, la siento mía de nuevo.
No recuerdo las contraseñas de acceso...
Reviso una por una las carpetas, las fotos, las cartas en Word que nunca mandé..
mis proyectos, mis proyecciones compra, los cálculos de ahorro.
mis páginas en favoritos, mi fondo de pantalla
Mi música, mis listas de reproducción.
ÉL, ella,
mezclándose en mis recuerdos al costado de mi taza de té verde.
Presiono la lista TROVA y viajo lentamente a través de todos estos meses de ausencia.
Silvio me ha hecho reaccionar...
He vuelto!
Está mas lenta, la siento mía de nuevo.
No recuerdo las contraseñas de acceso...
Reviso una por una las carpetas, las fotos, las cartas en Word que nunca mandé..
mis proyectos, mis proyecciones compra, los cálculos de ahorro.
mis páginas en favoritos, mi fondo de pantalla
Mi música, mis listas de reproducción.
ÉL, ella,
mezclándose en mis recuerdos al costado de mi taza de té verde.
Presiono la lista TROVA y viajo lentamente a través de todos estos meses de ausencia.
Silvio me ha hecho reaccionar...
He vuelto!
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